Sois conscientes, desde el primer momento, de que mejorar vuestra fertilidad y salud os ayudará en la búsqueda de vuestro hijo.
Lleváis un tiempo buscando el embarazo y todavía no ha llegado.
Habéis tenido una o varias pérdidas gestacionales.
Te han dicho que ya eres demasiado mayor para ser mamá o que tu reserva ovárica es baja.
Sabéis o sospecháis de algún aspecto en vuestra vida o alteración como causa que dificulta la llegada del embarazo.
Os han indicado que sois candidatos para un tratamiento de reproducción asistida, pero no os convence el diagnóstico y queréis una segunda opinión y opción.
Vuestras creencias os impiden seguir un tratamiento de reproducción asistida.
Vais a iniciar o ya estáis inmersos en algún ciclo de reproducción asistida y queréis complementar el proceso, optimizando vuestra fertilidad de manera natural para aumentar las probabilidades de éxito.
Os habéis sometido a varios ciclos de reproducción asistida u otras prácticas y todavía no habéis conseguido un embarazo a término.
La situación os está afectando a nivel psicológico, llegando a convertirse en una obsesión que está deteriorando vuestra calidad de vida y/o de la pareja.